Artrosis: en qué consiste, síntomas y tratamientos

En Novophysio contamos con un enfoque integral para el tratamiento de la artrosis. La artrosis es una enfermedad degenerativa que afecta a las articulaciones del cuerpo. Aunque puede afectar a cualquier articulación, las áreas más comunes son las rodillas, las caderas, las manos y la columna vertebral. 

A medida que envejecemos, el cartílago que recubre nuestras articulaciones se desgasta gradualmente, lo que provoca dolor, rigidez y disminución de la movilidad.

¿En qué consiste?

La artrosis es una enfermedad crónica que se caracteriza por el deterioro del cartílago articular. El cartílago es un tejido elástico que amortigua los movimientos de las articulaciones y evita que los huesos se rocen entre sí. 

Con la artrosis, el cartílago se desgasta y se vuelve más delgado, lo que causa fricción y daño en los huesos subyacentes. A medida que avanza la enfermedad, se forman espolones óseos y las articulaciones se deforman.

Además del desgaste del cartílago, la artrosis también puede estar relacionada con factores genéticos, lesiones articulares previas, obesidad y malos hábitos de vida, como la falta de ejercicio físico y una mala alimentación.

La artrosis es una enfermedad que afecta principalmente a las personas mayores, aunque también puede presentarse en personas jóvenes debido a lesiones o predisposición genética. Se estima que alrededor del 10% de la población mundial sufre de artrosis, siendo más común en mujeres que en hombres.

Los síntomas de la artrosis pueden variar dependiendo de la articulación afectada, pero los más comunes incluyen dolor, rigidez, inflamación y dificultad para mover la articulación. Estos síntomas pueden afectar la calidad de vida de las personas, limitando su capacidad para realizar actividades diarias y afectando su bienestar emocional.

El diagnóstico de la artrosis se realiza a través de la evaluación de los síntomas, la historia clínica del paciente y la realización de pruebas como radiografías o resonancias magnéticas. Es importante realizar un diagnóstico temprano para poder iniciar un tratamiento adecuado y evitar el deterioro progresivo de las articulaciones.

El tratamiento de la artrosis se basa en aliviar los síntomas y mejorar la función de las articulaciones. Esto puede incluir cambios en el estilo de vida, como perder peso, hacer ejercicio regularmente y seguir una dieta equilibrada. 

También se pueden recetar medicamentos para aliviar el dolor y reducir la inflamación, así como terapias físicas y ocupacionales para fortalecer los músculos y mejorar la movilidad.

En casos más graves, cuando el daño en las articulaciones es severo, puede ser necesario recurrir a la cirugía. La cirugía de reemplazo articular, como la artroplastia de cadera o de rodilla, puede ser una opción para aquellos pacientes que no han obtenido alivio con otros tratamientos.

Principales síntomas

Los síntomas de la artrosis pueden variar dependiendo de la articulación afectada, pero los principales son el dolor, la rigidez y la disminución de la movilidad. El dolor suele ser crónico y empeora con la actividad física. 

También es común experimentar sensación de rigidez al despertar o después de estar en reposo durante mucho tiempo. A medida que avanza la enfermedad, la movilidad de la articulación se ve limitada, lo que dificulta realizar actividades diarias.

La artrosis es una enfermedad degenerativa de las articulaciones que afecta a millones de personas en todo el mundo. Se caracteriza por el desgaste del cartílago articular, lo que provoca dolor y limitación en la movilidad de las articulaciones afectadas. 

Aunque la artrosis puede afectar a cualquier articulación del cuerpo, las más comunes son las rodillas, las caderas, las manos y la columna vertebral.

En el caso de la artrosis de rodilla, los síntomas suelen incluir dolor al caminar, subir escaleras o realizar movimientos de flexión y extensión de la pierna. Además del dolor, también puede haber hinchazón y sensación de calor en la articulación afectada. 

La artrosis de cadera, por su parte, se caracteriza por dolor en la zona de la ingle y dificultad para caminar o levantarse de una silla.

La artrosis de manos puede causar dolor, rigidez y deformidad en los dedos. A medida que la enfermedad progresa, los dedos pueden adoptar una posición anormal, lo que dificulta la realización de actividades cotidianas como agarrar objetos pequeños o escribir. 

Por último, la artrosis de columna vertebral puede provocar dolor en la espalda, rigidez y dificultad para moverse o mantener una postura adecuada.

Es importante destacar que la artrosis no tiene cura, pero existen tratamientos que pueden aliviar los síntomas y mejorar la calidad de vida de los pacientes. Estos tratamientos pueden incluir medicamentos para el dolor, terapia física, cambios en el estilo de vida y, en algunos casos, cirugía. 

Además, es fundamental mantener un peso saludable, hacer ejercicio regularmente y evitar actividades que puedan dañar las articulaciones.

Tipos de artrosis

Existen diferentes tipos de artrosis, dependiendo de la articulación afectada. Algunos de los más comunes son:

1. Artrosis de rodilla: Esta es una de las formas más comunes de artrosis y afecta a la articulación de la rodilla. El dolor y la rigidez suelen ser los síntomas principales.
2. Artrosis de cadera: Afecta a la articulación de la cadera y puede causar dolor e dificultad para caminar.
3. Artrosis de manos: Es común en las articulaciones de los dedos y puede causar dolor y deformidades.
4. Artrosis de columna vertebral: Afecta a las vértebras de la columna y puede provocar dolor de espalda y rigidez.

Tratamiento a seguir en Novophysio

El objetivo es aliviar el dolor, mejorar la función y promover un estilo de vida saludable. Algunas de las opciones de tratamiento que se ofrecen incluyen:

• Fisioterapia: Nuestros fisioterapeutas diseñarán un programa personalizado de ejercicios y técnicas para fortalecer los músculos, mejorar la movilidad y reducir el dolor.
• Terapia ocupacional: Trabajamos en conjunto con terapeutas ocupacionales para ayudar a los pacientes a adaptarse a los cambios en su capacidad física y encontrar formas de realizar las actividades diarias de manera más efectiva y cómoda.
• Medicación: En algunos casos, se pueden recetar medicamentos para aliviar el dolor y reducir la inflamación.
• Cirugía: En casos graves en los que otros tratamientos no han funcionado, la cirugía puede ser una opción para reparar o reemplazar la articulación dañada.
• Estilo de vida saludable: Se alienta a los pacientes a mantener un peso saludable, hacer ejercicio regularmente y evitar factores que puedan empeorar la artrosis, como una mala alimentación y el tabaquismo.

En Novophysio, además de en Artrosis, somos expertos en otros campos de la fisioterapia, como Fisioterapia regenerativa o Fisioterapia neurológica. Si quieres más información acerca de nuestros servicios, contacta con nosotros o visita nuestra clínica. ¡Te esperamos!